Es importante pensar con anticipación sobre el EHV-1, especialmente antes de la temporada de exposiciones.
El herpesvirus equino tipo 1 (EHV-1) es un virus altamente contagioso que afecta a los caballos y otros équidos, como los burros y las mulas. El virus se transmite a través de las secreciones respiratorias, como la secreción nasal y la saliva, así como a través del contacto con objetos contaminados, como los cubos de agua y comida. El EHV-1 puede causar una variedad de signos clínicos en los caballos, entre ellos fiebre, pérdida de apetito, secreción nasal y alteración de la coordinación. En casos graves, puede causar dificultad respiratoria, abortos en yeguas preñadas e incluso la muerte.
Para prevenir la propagación del EHV-1, los propietarios de caballos deben tomar las siguientes medidas:
- Vacune a sus caballos : existe una vacuna contra el EHV-1 y se recomienda que todos los caballos sean vacunados de manera rutinaria para protegerse contra el virus. La vacuna generalmente se administra en una serie de dos o tres dosis, según la edad del caballo y su historial de vacunación previo.
- Mantenga una buena higiene : es importante limpiar y desinfectar periódicamente el entorno en el que viven los caballos, incluidos los establos, los baldes de agua y comida y cualquier otro equipo que entre en contacto con sus secreciones respiratorias. Esto puede ayudar a prevenir la propagación del EHV-1 y otras enfermedades infecciosas.
- Limite el contacto entre caballos : para prevenir la propagación del EHV-1, es importante limitar el contacto entre caballos tanto como sea posible. Esto significa evitar compartir equipos, como herramientas de aseo y baldes de agua, y evitar exponer a su caballo a otros caballos que puedan estar infectados con el virus.